La Navidad está a la vuelta de la esquina, y con ella llega una de las tradiciones más mágicas de Europa: los mercadillos navideños. Desde Alemania hasta España, estos mercadillos llenan las calles de luz, música y el dulce aroma del vino caliente y los dulces de temporada. Si buscas inspiración para tus vacaciones navideñas, te invitamos a descubrir los mejores mercadillos de Navidad en Europa, donde la magia de la temporada se vive en cada rincón.
1. Mercadillo de Navidad de Núremberg, Alemania Este es uno de los mercadillos navideños más antiguos y emblemáticos de Alemania. Celebrado desde el siglo XVII, el mercadillo de Núremberg ofrece desde artículos de decoración hasta dulces como el famoso «Lebkuchen» (pan de jengibre). Su ambiente tradicional y la belleza de las luces lo convierten en una parada obligada.
2. Mercadillo de Navidad de Estrasburgo, Francia Estrasburgo, conocida como la «capital de la Navidad», organiza uno de los mercadillos más grandes y antiguos de Europa. Con más de 300 puestos, los visitantes pueden encontrar artesanías únicas, adornos navideños, y degustar especialidades alsacianas como el «bretzel» y el «vin chaud» (vino caliente).
3. Winter Wonderland en Hyde Park, Londres, Reino Unido Winter Wonderland es uno de los destinos navideños más famosos de Londres. Este mercadillo navideño, ubicado en Hyde Park, combina atracciones como una gran noria y una pista de patinaje sobre hielo, con tiendas que venden desde joyería artesanal hasta golosinas. Perfecto para familias y amigos.
4. Mercadillo de Navidad en el Rastro de Madrid, España Madrid acoge varios mercadillos durante la Navidad, pero el mercadillo del Rastro es uno de los más destacados. Con cientos de puestos, es ideal para encontrar regalos únicos, desde figuras para el belén hasta adornos artesanales. Además, podrás disfrutar de los churros con chocolate en el cercano Mercado de San Miguel.
5. Mercado de Adviento en Viena, Austria El mercado de Adviento en Viena es un sueño navideño hecho realidad. Ubicado frente al Ayuntamiento, este mercadillo ofrece puestos de artesanía, una pista de patinaje y una atmósfera mágica que hace sentir el espíritu de la Navidad. Es un lugar perfecto para una escapada romántica.
Conclusión: Visitar un mercadillo navideño es la forma perfecta de sumergirse en el espíritu festivo, descubrir tradiciones locales y encontrar regalos únicos para tus seres queridos. Así que, ¿por qué no hacer una escapada esta Navidad y visitar alguno de estos mercados?